viernes, 30 de octubre de 2009

INFIDELIDAD... EFECTO SECUNDARIO: CANIBALISMO



La vida diaria pone ante los ojos del cronista opotunidades insólitas, con hechos que nos dejan con la quijada en calidad de tapete. Quiero contarles el hecho que aun no termino de entender que presencie en dias pasados, y que tiene tinte de tragedia griega y de humor negro.

Hace unos dias estaba en la sala de espera de radiología, donde sucedio lo de siempre, una cita tremendamente temprano y bueno, al llegar resulta que por causas ajenas a la voluntad del radiologo debí esperar bastante para que me atendieran. Amablemente el joven me solicitó los documentos de la cita, y me dijo:

- Muy bien, señora... todo en orden, pero debo pedirle un favor... Acaban de llegar de emergencia unas personas, y debo pasarlas antes que a usted. Pero no se desespere... en cuanto salgan, de inmediato la paso.

Sin muchas ganas, asentí con la cabeza. A los pocos minutos pasó el camillero con una chica que no rebasaba los 30 años de edad, amarrada en una camilla y severamente golpeada del rostro. Pero lo mas impactante era la amputación de 3 dedos de la mano izquierda. Un minuto después, pasa el segundo camillero con una chica de edad similar, y en las mismas condiciones físicas, sólo que a esta segunda le faltaban todos los dientes del frente y traía la nariz rota.
Tras ellas caminaban varios policias, que tuvieron que esperar en la misma sala donde yo estaba. Mi primera impresión fué que las jóvenes habian sido participes en un grave accidente de auto o motocicleta... pero los comentarios de ciertos familiares de una de las heridas me sacó de mi error. Transcribo fielmente la conversación de la que fuí testigo:

"- Ay, muchacha... ¿ Que le pasó a tu hermana que viene tan golpeada y hasta sin dedos ?
- ¡Pues esta sonza, que se agarró a golpes con la querida de su marido!...
- Pero como va a ser... si ella es la señora, ¿como se rebajó a la altura de la querida?
- Es que ya la traía atravesada... figurese nomás... ella y sus hijas salieron de paseo... cuando van llegando, encuentran a ese desgraciado ahi, metido con la piruja esa... pues esta no se aguantó las ganas y se trenzaron...
-¿Pero, y los dedos?
- pues mi hermana le estaba jalando los pelos, y le arañó la cara... la vieja se puso viva y se los arrancó a mordidas...
- Valgame Dios... y ¿como estuvo lo de los dientes de la perdida esa?
- Ah... que cuando mi hermana se vio sin los dedos, pues sabe Dios como le hizo, pero el caso es que se los tumbó a patadas, y le quebró la nariz.
- Virgen de Guadalupe... Si esas viejas nomas sirven para infelizarnos la vida"

Fiuuu... ni Tyson en sus buenos tiempos tuvo una batalla tan brutal como la de las dos mujercitas... por cierto, las llevaban amarradas dado que despues de llegar la patrulla y la ambulancia a recogerlas, aun tuvieron que intervenir terceros para evitar una desgracia mayor.

¿ Y el marido? Pues bien, el tipo caminaba ileso por los pasillos, solo preocupado porque a el lo fueran a detener tambien...

Quiza de haber sido yo quien encontrara a su marido en esa situacion, no hubiera actuado de esa manera... Talvez hubiera convecido a la amante que entre las dos le dieramos en la torre al marido, yo, por haberme faltado a la promesa de fidelidad, y ella, por ser tan poco hombre de no cumplirle y darle su lugar... o a lo mejor... en este momento estaría rindiendo mi declaración por doble homicidio intencional.

Quien sabe... Solo podemos tener claro nuestro modo de actuar mientras estamos en la situación. De algo si estoy convencida. Sé que el infiel sólo estará con ellas mientras espera su recuperacion. No creo que ni los dedos ni los dientes lo hagan cambiar de actitud. Recuerdo la explicación mas idiota de la que tengo memoria: "Amor... comprende, la infidelidad esta en los genes... lo ví en el discovery channell".

1 comentario:

  1. Oye pues me clave en tu blog,
    Muy interesantes cosas las que dices.
    Seguire leyendo más y dejando comentario.

    Y pues este caso esta bruto!
    Como llego a tener fuerza en los dientes como para arrancarle los dedos a la mujer?
    Y la otra... ignoro lo que paso en su mano y se da el tiempo para tumbarle los dientes a la otra?
    Vaya que salvajes, lo que hacen los celos.
    Y todo por un pelele que no vale la pena.

    Y concuerdo exactamente con lo que dices tu.
    A hablar tranquilamente ambas para ver como pasaron las cosas.
    Y tomar las debidad desisiones.
    Que tal si la amante no sabia que el era casado?
    Que tal si el nunca se lo dijo a ella?
    Eso nos podria pasar a cualquiera... o no?
    Hay que saber como reaccionar y usar la empatia.

    Muy impresionante la imagen.
    Saludos

    Atte: Lily Sánchez

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